Trigliceridos

Los triglicéridos son moléculas de grasa que tenemos en la sangre pero cuyos niveles han de ser controlados y si se encuentran altos, hemos de bajarlos inmediatamente de la manera más natural posible.

La forma en la que se generan estas moléculas puede ser:

• Por nuestra alimentación: a través de los aceites y las grasas que ingerimos.
• Producidas por el hígado, que transforma el exceso de hidrato de carbono y calorías en grasas.

Los triglicéridos altos suponen un riesgo para nuestra salud a nivel cardiovascular, lo que se ve especialmente agravado en personas con niveles de colesterol alto (o descompensaciones entre el colesterol bueno y malo).

La manera más natural de reducir o controlar los niveles de triglicéridos en sangre es adoptar una dieta pobre en grasas (especialmente la de la carne) y favorecer el consumo de aceites Omega 3, que se encuentra en el pescado azul y en aceites vegetales como el de linaza, girasol o soja.

Con respecto al consumo de lácteos, procuraremos que sean desnatados o bajos en grasas; una buena alternativa a estos son los productos de soja, tan presentes ahora en la oferta de mercado.

Habremos de evitar el exceso de azúcares: bollería industrial, miel, zumos con azúcar añadido, exceso de pan o cereales (no olvidemos que el exceso de azúcar puede hacer que el organismo puede transformarlo en triglicéridos). Optar por pan, cereales y pasta integrales, con alto contenido en fibra nos ayudará, ya que ésta dificulta la absorción de grasas y azúcares.

Es recomendable aumentar el consumo de legumbres (evitando carnes y embutidos). Los ajos crudos también ayudan a reducir los triglicéridos. El consumo de alcohol está altamente contraindicado.

También podemos ayudarnos de manera natural mediante el consumo de plantas medicinales que nos ayudarán a reducir los niveles de triglicéridos. Destacan, entre otras, la alcachofera, la cúrcuma, las semillas de lino y la lecitina de soja.

Todo ello acompañado de una dosis de ejercicio físico moderado contribuirá, además de a reducir estas perjudiciales moléculas, a mejorar nuestra calidad de vida.

Fuente Viviendo Sanos